El maracayero liga .359 luego del Juego de Estrellas, antes de ese evento bateó .253
Nota publicada en el Universal el domingo 4 de agosto de 2013
"En cualquier momento Martín Prado va a volver hacer el que fue en Atlanta", repitió en varias ocasiones el manager de los Cascabeles de Arizona, Kirk Gibson en los primeros meses de temporada cuando la ofensiva del criollo lucia apagada.
Después del Juego de Estrellas, Prado se ha soltado con su bate respondiendo a la confianza de la directiva de los Cascabeles, quienes los trajeron al desierto por su máxima estrella, Justin Upton, quien pasó a los Bravos de Atlanta.
El maracayero luego del Clásico de luminarias (sin contar la jornada de ayer) ha dado 19 imparables, seis dobles, un triple, un jonrón y ha remolcado nueve carreras para dejar en ese periodo un promedio de .358, mientras que antes del Juego de Estrellas, dejó un tímido .253, un promedio muy bajo para un pelotero que venía de ser de unos de los mejores bateadores de contacto en la Liga Nacional en los últimos cinco años, ligando .320 en 2008 y .301 en 2012 en su última temporada con los Bravos.
El buen momento de Prado se ejemplifica con el hecho de que ha dado dos o más hits en seis de los últimos 10 juegos que ha disputado (sin contar la jornada de ayer). El criollo tuvo el viernes su segunda aparición como cuarto bate de los Cascabeles y se fue de 5-2 con par de dobles y una remolcada. En su dos de apariciones como el cuarto en la alineación, suma de 9-5, con tres dobles, tres anotadas y dos empujadas.
"Soy el mismo que cuando estaba con los Bravos; no quiero cambiar nada. Solo trato de salir a jugar el juego de la manera correcta. Eso es lo más importante", dijo Prado, quien parece haber encontrado el time en su swing.
"Los últimos días me siento mejor en el plato", dijo Prado recientemente amlb.com.
El venezolano de 29 años de edad, tuvo un comienzo decepcionante en Arizona, dejando un bajo average .246 en los primeros tres meses de campaña- El propio antesalista confesó en ese momento que se sentía presionado por ser el sustituto de la antigua estrella del desierto.
"Estaba tratando de que (la gente en Arizona) creyera en lo que podía hacer, pero no estaba funcionando. Estaba tratando de ser otro", confesó Prado en mayo, aunque luego, al mes siguiente tuvo su peor periodo al bate, ligando apenas 19 hits en 91 turnos al bate para dejar un average de .206.
Fue a partir de julio que Prado reaccionó y volvió a demostrar sus dotes ofensivos, finalizando ese mes con 30 imparables en 95 turnos, para dejar un promedio al bate de .316.
El buen momento ofensivo del maracayero le ha permitido elevar el average de .246, que tenía a principios de julio, al .267 que posee actualmente.
Después del Juego de Estrellas, Prado se ha soltado con su bate respondiendo a la confianza de la directiva de los Cascabeles, quienes los trajeron al desierto por su máxima estrella, Justin Upton, quien pasó a los Bravos de Atlanta.
El maracayero luego del Clásico de luminarias (sin contar la jornada de ayer) ha dado 19 imparables, seis dobles, un triple, un jonrón y ha remolcado nueve carreras para dejar en ese periodo un promedio de .358, mientras que antes del Juego de Estrellas, dejó un tímido .253, un promedio muy bajo para un pelotero que venía de ser de unos de los mejores bateadores de contacto en la Liga Nacional en los últimos cinco años, ligando .320 en 2008 y .301 en 2012 en su última temporada con los Bravos.
El buen momento de Prado se ejemplifica con el hecho de que ha dado dos o más hits en seis de los últimos 10 juegos que ha disputado (sin contar la jornada de ayer). El criollo tuvo el viernes su segunda aparición como cuarto bate de los Cascabeles y se fue de 5-2 con par de dobles y una remolcada. En su dos de apariciones como el cuarto en la alineación, suma de 9-5, con tres dobles, tres anotadas y dos empujadas.
"Soy el mismo que cuando estaba con los Bravos; no quiero cambiar nada. Solo trato de salir a jugar el juego de la manera correcta. Eso es lo más importante", dijo Prado, quien parece haber encontrado el time en su swing.
"Los últimos días me siento mejor en el plato", dijo Prado recientemente amlb.com.
El venezolano de 29 años de edad, tuvo un comienzo decepcionante en Arizona, dejando un bajo average .246 en los primeros tres meses de campaña- El propio antesalista confesó en ese momento que se sentía presionado por ser el sustituto de la antigua estrella del desierto.
"Estaba tratando de que (la gente en Arizona) creyera en lo que podía hacer, pero no estaba funcionando. Estaba tratando de ser otro", confesó Prado en mayo, aunque luego, al mes siguiente tuvo su peor periodo al bate, ligando apenas 19 hits en 91 turnos al bate para dejar un average de .206.
Fue a partir de julio que Prado reaccionó y volvió a demostrar sus dotes ofensivos, finalizando ese mes con 30 imparables en 95 turnos, para dejar un promedio al bate de .316.
El buen momento ofensivo del maracayero le ha permitido elevar el average de .246, que tenía a principios de julio, al .267 que posee actualmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario